LIMITACION DE ANTIBIOTICOS EN SALMONICULTURA DEBE SER UNA PRIORIDAD
marzo 6, 2011
La organización internacional Oceana -entidad medioambiental cuyo objetivo fundamental es la protección y conservación de los océanos- destacó el valor del primer informe que hizo público esta mañana la Mesa Trabajo convocada por el Ministerio de Economía con el objeto de identificar los problemas que afectan a la salmonicultura y de avanzar en sus soluciones. Sin embargo, enfatizó en la necesidad de dar prioridad a la disminución del uso de antibióticos en esta industria. Para la organización medioambiental, el informe tiene la virtud de incorporar los problemas ambientales que históricamente han sido negados por parte de la industria salmonera, y de establecer plazos concretos para avanzar en la solución de dichos problemas. Sin embargo, Oceana destacó que sólo se cumplió parcialmente con las expectativas que se habían levantado respecto al informe, pues el uso excesivo de antibióticos, que es uno de los problemas más graves y que más preocupación ha causado en los mercados del salmón chileno, sólo fue incluido en una larga lista de temas a tratar, sin darle la prioridad que, a juicio de la organización, le corresponde. “Estaremos pendientes del curso que tome la Mesa de Trabajo de la Salmonicultura, procurando que el uso excesivo de antibióticos tenga la máxima prioridad, y que podamos contar lo antes posible con una nueva regulación que limite fuertemente su uso, prohibiendo la utilización de quinolonas, por un lado, y controlando efectivamente la cantidad total de otros antibióticos usados por la industria salmonera asentada en Chile, por otro”, señaló Alex Muñoz, Director Ejecutivo de Oceana. “El Gobierno parece no haber reparado en que en Chile se arrojan más de 200 toneladas de antibióticos al año a los salmones de cultivo, mientras que en Noruega, primer productor del mundo, se usa menos de una tonelada”, agregó Muñoz. “Una nueva regulación que disminuya drásticamente el uso de antibióticos es urgente, no sólo por los problemas ambientales que provoca sino por el riesgo que el abuso de estas substancias implica para la salud pública”. Asimismo, según la organización, hay datos del año 2005 que indican que poco más del 80% de los antibióticos aplicados en salmones cultivados en Chile corresponden a quinolonas, familia de antibióticos cuya aplicación en animales no está autorizada en otros países -incluidos aquellos que importan nuestro salmón-, dada su particular capacidad de producir resistencia en bacterias. Cabe recordar que la resistencia bacteriana causada por el abuso de estas sustancias no sólo se produce en los salmones, sino también en aquellas bacterias presentes en el entorno que rodea los centros de cultivo, y en los peces silvestres de la zona que luego se venden en los mercados locales. Una investigación de OCEANA demostró que peces silvestres de consumo humano (robalos, cabrillas y truchas silvestres), pescados alrededor de una balsa jaula en Cochamó, X Región, habían ingerido alimento para salmón y que la carne de algunos ejemplares contenía antibióticos usados en la salmonicultura. Esta falta de regulación y control puede generar una pérdida en la efectividad de los antibióticos usados, no sólo en los salmones sino en las mismas personas, lo que constituye un grave problema de salud pública. Oceana ha sostenido reuniones con diversas autoridades para plantear la necesidad de contar con una nueva regulación de antibióticos en Chile. La organización fue recibida por la Comisión de Recursos Naturales, Bienes Nacionales y Medio Ambiente de la Cámara de Diputados, y por el Director Nacional de Sernapesca, presentándoles los antecedentes científicos que avalan la necesidad de limitar urgentemente el uso de antibióticos en la salmonicultura. Más información Annelore Hoffens – Comunicaciones Oceana 7957140 / 89202027 ahoffens@oceana.org www.oceana.org