Repudian aprobación de mina Invierno en Isla Riesco y llaman a acelerar desarrollo de ERNC
agosto 16, 2011
Ante la reciente aprobación del proyecto Mina Invierno en Isla Riesco por parte del Consejo de Ministros para la Sustentabilidad, Oceana manifestó su rechazo señalando que esta decisión se tomó a pesar de los antecedentes científicos que dan cuenta de los impactos que tendrá la operación de dicha mina.
“Esta es nueva mala decisión del Gobierno que afectará no sólo el medioambiente de Isla Riesco, sino que la salud de las personas que viven en los lugares donde están las termoeléctricas que usarán un carbón de mala calidad y más contaminante. Lamentamos profundamente que se desperdicie de esta manera el potencial que tiene Chile para las energías renovables”, señaló el director ejecutivo de Oceana, Alex Muñoz.
La semana pasada Oceana presentó a la Ministra de Medioambiente un informe científico que advierte el peligro al que estarían expuestas diversas especies de aves y mamíferos marinos, de aprobarse este proyecto en la Región de Magallanes. El informe destaca los impactos que podrían sufrir especies emblemáticas como el pingüino de Magallanes, la ballena jorobada y la orca, con la liberación de metales pesados provenientes de la actividad minera, así como con los posibles derrames de petróleo y colisiones de grandes cetáceos asociadas al aumento de flujo marítimo que conllevaría la explotación carbonífera en esta zona. A esto se suma los antecedentes presentados durante el proceso por el grupo Alerta Isla Riesco que ha liderado la oposición a la minería de carbón en la isla.
Con anterioridad Oceana había solicitado a la Ministra de Medioambiente, además, que se midan los niveles de mercurio en el carbón de isla Riesco así como su poder calorífico, para determinar la contaminación que este metal pesado podría generar en los lugares del país donde se use como combustible para plantas termoeléctricas.
De manera preliminar un informe geológico realizado en la isla para caracterizar el carbón, indica la presencia de tres elementos químicos peligrosos -arsénico, mercurio y manganeso- en niveles superiores a los tolerables, en un porcentaje importante del carbón muestreado. Asimismo, el informe señala que estos tienen un poder calorífico inferior a medio lo que, junto a otros parámetros químicos, permite determinar que el uso de este carbón tendrá altos niveles de contaminación.
“Chile está improvisando su política energética de manera irresponsable. Existen numerosas fuentes alternativas que son cada día más competitivas y que podrían estar operando en Chile a un precio razonable en el mediano plazo. Si se fijara como meta legal que el 20 por ciento de la energía sea renovable no convencional para el año 2020, se contaría con 4000 megawatts limpios y el precio de la energía no subiría más de 2 por ciento. Eso demuestra que no es necesario seguir aprobando proyectos que carbonizan nuestra matriz energética”, señaló al respecto el director ejecutivo de Oceana, Alex Muñoz.
A juicio de la organización es necesario que haya un proceso de reforma energética participativo y conducido con liderazgo, porque la reformulación de los criterios en los que se basa la política energética chilena nos permitiría encontrar una nueva forma para lograr un suministro fiable, a un precio razonable, con los menores impactos ambientales y una distribución equitativa tanto de los beneficios como de los costos.