SOLICITAN A PRESIDENTA BACHELET QUE IMPULSE RECOMENDACIONES DE LA ONU
marzo 6, 2011
Organizaciones ambientalistas y de pesca artesanal solicitaron hoy a la Presidenta Michelle Bachelet que en la tercera reunión para crear la Organización Regional de Administración Pesquera del Pacífico Sur (ORAP-PS), Chile apoye las recomendaciones de la Asamblea General de Naciones Unidas (AGNU), referidas a la protección de los ecosistemas marinos vulnerables de fondos marinos de Aguas Internacionales.
Para ello, exigen la urgente implementación de medidas interinas de carácter precautorio que prohíban temporalmente las destructivas operaciones de pesca de arrastre de fondo fuera de las aguas jurisdiccionales en el Pacífico Sur. Esta moratoria debe regir –dicen las ONGs-, hasta que finalicen las negociaciones de la ORAP-PS, se genere la información científica necesaria y se implementen medidas de manejo pesquero de acuerdo con la legislación internacional.
Esta tercera ronda de negociaciones que se realizará en Reñaca, entre el 30 de abril y el 4 de mayo, reunirá a 22 países, tanto costeros como poseedores de flotas pesqueras de aguas distantes. El área sujeta a negociaciones representa un cuarto de las zonas de la alta mar del planeta.
Chile es co-auspiciador de la iniciativa junto a Australia y Nueva Zelandia, y participan además la Unión Europea, República Popular China, Federación Rusa, Japón, Corea del Sur, Canadá, Estados Unidos y el Foro de Estados Islas del Pacífico, entre otros.
Como actividad preparatoria a este encuentro Oceana, Greenpeace, Ecoceanos, Centro de Conservación Cetácea, Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales y la Confederación Nacional de Pescadores Artesanales (Conapach), entregaron una carta a la Presidenta Bachelet en que llaman a la mandataria a que “Chile asuma un posición de liderazgo en la protección de los ecosistemas marinos vulnerables de alta mar y de los recursos pesqueros frente a las prácticas pesqueras destructivas”.
Las ONGs, también denuncian “crecientes operaciones de flotas industriales no reguladas y no reportadas de la Unión Europea, China, Corea del Sur y próximamente de la Federación Rusa en el Pacífico Sur oriental, frente a las costas de los Estados Latinoamericanos”.
Las organizaciones solicitaron que en esta reunión se implemente la resolución 61/105 de la AGNU, que señala que al 31 de diciembre del 2007 deben finalizar las operaciones de naves de pesca que no puedan demostrar que sus actividades son realizadas previniendo los impactos adversos significativos en áreas donde existan o puedan existir ecosistemas marinos vulnerables. Estas zonas incluyen, pero no se limitan, a montes submarinos, chimeneas hidrotermales y corales de aguas frías.
Además exigen que “los Estados suministren información relevante proveniente de la evaluación del impacto ambiental de las pesquerías de arrastre al Presidente de la reunión y al Grupo de Trabajo Científico, el cual contribuirá al proceso de revisión científica y sus recomendaciones”.
DEMANDAS AL GOBIERNO DE CHILE
Las ONGs y pescadores también solicitaron a la Presidenta Bachelet que Chile, finalmente después de doce años, adhiera al Acuerdo de las Naciones Unidas sobre Pesca de Alta Mar de 1995, proceso que ya ha sido efectuado por los otros co-patrocinadores de la ORAP-PS, y por la Unión Europea, los países del Foro de Islas del Pacífico y próximamente por Japón.
Además reiteraron la demanda para que Chile unilateralmente prohíba temporalmente a las naves pesqueras bajo bandera nacional, realizar operaciones de pesca destructiva y no regulada -incluida la pesca de arrastre de fondo-, sobre ecosistemas marinos vulnerables fuera de la Zona Económica Exclusiva.
Estas medidas, basadas en el Principio Precautorio, el Enfoque Ecosistémico y las recomendaciones 61/105 de la AGNU-2006, debieran regir hasta que se establezca la ORAP-PS, se desarrollen las investigaciones científicas necesarias y se adopten las regulaciones adecuadas consistentes con las obligaciones de la legislación internacional.
APOYO A DEMANDAS DE PESCADORES
Las organizaciones hicieron notar su apoyo a la pesca artesanal chilena que demanda participar en las discusiones del Pacífico Sur y se le reconozcan los derechos de acceso y uso equitativo y sostenible de los recursos marinos de aguas internacionales.
Además las ONGs, comparten con los pescadores el llamado para que se prioricen aquellas capturas de recursos pelágicos, como el jurel, orientadas hacia el consumo humano directo.
OPINIÓN DE ORGANIZACIONES
El Coordinador de campaña de la oficina chilena de Greenpeace, Samuel Leiva, afirmó que “nos parece que la Presidenta Bachelet tiene una oportunidad única en apoyar la seguridad alimentaría nacional y los ecosistemas marinos en esta reunión en Reñaca, incorporando la prohibición de la pesca de arrastre de fondo en su Gobierno, y no dejar que sea sólo el enfoque comercial de las industrias pesqueras el que finalmente prime en este encuentro”.
“Sería lamentable que Chile como co-patrocinador de la iniciativa finalmente negocie solo quién se queda con los recursos en vez de generar, de una vez, instancias de manejo y medidas concretas de conservación de los ecosistemas marinos”, agregó el representante de Greenpeace.
Por su parte, Cristian Gutiérrez de Oceana dijo que “lo relevante para Chile en esta 3ª Conferencia para la creación de la ORAP-PS es que somos los anfitriones, además de ser los promotores de esta iniciativa en la región. Por esto, necesitamos que el Gobierno dé una señal potente a la comunidad internacional, mostrando que los temas de conservación marina y sustentabilidad pesquera son prioritarios dentro de nuestra agenda ambiental e internacional”.
Gutiérrez señaló que por lo mismo, “solicitamos al gobierno chileno que prohíba, transitoriamente, a las naves bajo bandera nacional realizar operaciones de pesca de arrastre de fondo fuera de la ZEE, hasta que sea establecida esta ORAP”.
En tanto, Juan Carlos Cárdenas, Coordinador en América Latina de la Coalición para la Conservación de los Fondos Marinos puntualizó que “esta reunión será la primera oportunidad que tendrán los Estados y la industria pesquera para demostrar a la opinión pública mundial si tienen una real voluntad política para implementar urgentemente las recomendaciones de la Asamblea General de la ONU”.
“Estas recomendaciones, buscan detener la irreversible destrucción de milenarios y vulnerables ecosistemas marinos y de frágiles pesquerías -tales como la de orange roughy, besugo o alfonsino-, que están amenazadas por las no reguladas y destructivas operaciones de flotas de arrastre de fondo”.
Cárdenas sostuvo además que “existe una creciente preocupación regional por la llegada de grandes buques factorías de la Unión Europea, China, Corea del Sur y Ucrania, para disputarse el botín pesquero frente a las costas latinoamericanas”.